Ayer continuaba con mi lectura de "Un milagro en equilibrio" de Lucía Etxebarria y, de repente, me topé con unos párrafos que hablaban sobre brujas (para no llevar a equívocos el libro no tiene nada que ver con este tema). Son los que escribo a continuación, quería compartirlos con vosotros porque tienen montones de mensajes dentro.
.
"Para cuando leas esto ya te sabrás de memoria el cuento de Blancanieves [...] y ya sabrás que su madrasta tenía un espejo mágico en el que se miraba todas las mañanas [...] y al que le preguntaba quién era la más bella del reino. Invariablemente, una voz desde el azogue contestaba: 'Tú, mi reina'. Hasta el día en que el espejito de marras, harto de repetirse, se salió por la tangente y le dijo aquello de que su hijastra era más bella. Y en ese mismo instante comenzó la ruina de la reina.
Todas las brujas tienen un espejo. También tienen, puestos a enumerar, una vara, un pentáculo, una campana y una daga. ¿Y una escoba? No, la escoba no es necesaria, en realidad era una forma de esconder la vara de avellano, por si se pasaba por casa un inquisidor, tú ya me entiendes.
Ahora cualquiera tiene un espejo, pero entonces, en los tiempos de Blancanieves, los espejos eran raros y caros. Mucha gente moría sin haber visto nunca su propio reflejo, sin saber cómo era su cara.
¿Y por qué tenían las brujas un espejo? Porque el primer conjuro que una bruja debe realizar es el de encantarse a sí misma en los dos sentidos de la palabra. Debe mirarse al espejo cada mañana y repetirse siete veces (ya sabes que siete es el número mágico, por algo tú naciste a las siete en punto): eres bella, eres adorable, formas parte del universo. Y este primer encantamiento le proporcionará la fuerza suficiente para poder realizar después cualquier otro hechizo.
Muchos terapeutas, que nada saben de brujas ni de magia, recomiendan lo mismo a sus pacientes. Lo sé porque cuando fui a aquella terapia para mujeres maltratadas se lo escuché a la psicóloga que dirigía el grupo. Había que levantarse cada mañana, plantarse desnuda frente al espejo y decirse 'te quiero' a una misma. Como suena."
.
Tengo debilidad por las brujas, es más, me considero una de ellas.